LA PEGATINA, el rotundo éxito de la autogestión.

A Adriá Salas no le gusta dejar en manos de los demás, nada que él mismo pueda hacer. 
Con este lema básico, cumplido a extremos "de talibán", La Pegatina logró lo que pocos en la escena musical local. 


En 2006 y luego de tres años de experimentación sonora y algunos conciertos encima, Adrià, Ovidi y Rubén decidieron que era el momento de grabar una maqueta. Se dejaron convencer de que mejor era grabar directamente el disco. Así lo hicieron, y en 2007 apareció “Al carrer”.


Ninguna discográfica les pareció interesante, no le creyeron a ninguna. Y tiraron para adelante solos.


Como sabían que no irían a vender demasiado, por no decir casi nada, decidieron colgar su disco en la web y fomentar la descarga en formato mp3. Este método, más un directo tan efectivo como contundente y un repertorio muy apto para la fiesta, resultó en la fórmula que comenzó a posar la atención del gran público sobre la banda. 



4.500 copias vendidas, 180.000 descargas y más de 250 conciertos a sus espaldas. ¿Quién podría pedir más? Si hasta vendieron 300 copias en Japón, llegaron a ser finalistas del Disco Catalán del Año 2007 y montaron una gira por Suiza, Francia e Italia.


Y todo siguió bajo control. Bajo el estricto control de ellos mismos. La autogestión como dogma. Cómo única vía para agotar la taquilla diez días antes de la fecha de su presentación en la sala Apolo... La Pegatina, un auténtico fenómeno de estudio para las escuelas de marketing.


Una entrevista de Marcelo Espiñeira.



Cuánto trabajo...  
ADRIÀ SALAS: Estábamos por grabar una maqueta y nuestros amigos de Che Sudaka nos convencieron de que grabáramos un disco. Vimos que las discográficas no sabían bien como apoyarnos y a muchas ni les creíamos. Si haces un disco, no tiene sentido que nadie se entere. Entonces, decidimos organizarnos. Uno a la web, otro a la comunicación y el otro al management. El proyecto fue creciendo por nuestra insistencia y la de nuestros amigos.

Se han hecho de unos cuantos amigos, porque 180.000 descargas del disco..  
(risas). Si, con el primero tuvimos 180.000. Y del segundo llevamos 12.000 en dos semanas. Ayer se descargaron mil de Argentina. Hemos puesto publicidad en Facebook, y en un solo día tuvimos todas esas descargas.



Si que sabéis aprovechar los medios.  
Nadie había explotado el Facebook aún, como publicidad. Nos gusta apostar antes que los demás, con estas cosas. Y ahora somos siete, y estamos mejor organizados que antes. 


Y también pueden concentrarse más en la música, disponiendo de más tiempo.
No lo creas. También han crecido los objetivos, asi que casi que es la misma faena que antes.

No temes que les pueda pasar como a los Arctic Monkeys en inglaterra?
El ascenso rápido es peligroso. Teníamos muchas dudas con el segundo disco. Siempre está la posibilidad de que no guste, de que no venda nada, de que nos vaya todo para abajo. Pero, pase lo que pase, hemos mejorado nuestro directo. Gambeat (Radio Bemba) nos ha enseñado que para vivir de esto, tenemos que tener un buen directo, una buena comunicación de lo que haces, conseguir donde tocar, tener actitud y ser agradecido con todo el mundo. Con eso ya puedes vivir de la música. Entonces, no nos preocupan tanto estos fenómenos. Estos peligros están más latentes cuando dejas todo en manos de una discográfica. Que no es nuestro caso. 


Se nota el salto de calidad en este segundo disco, pero igual la fiesta sigue vigente en vuestra música. 
Eso está clarísimo. Queremos hacer música que nos permita conectar con la gente. Nos gusta disfrutar de esa interacción en el escenario. La gente disfruta mucho en nuestros conciertos, baila, salta, hace palmas, se lo pasan bien. Y nuestra música busca romper esa barrera que siempre está entre el público y el artista. 


Digamos que integran una camada que resucitó la rumba catalana. 
Está claro que en este último año y medio han resucitado todos los grupos de rumba. Luego que saliera La Troba Kung Fú, han vuelto Sabor de Grácia, Los Chichos, Ai Ai Ai, etc. Nosotros decimos que hacemos “rumba urbana”. Porque la hacemos más marchosa que la tradicional. Pero desde siempre escuchamos a Gato Perez, Los Chichos, Los Mártires, y ahora puede estar de moda nuevamente. Pero, en cualquier momento se pasa. 



Habéis incorporado acordeón y trompeta en este disco. 
Si, el acordeón y la trompeta nos han hecho más festivos todavía. Y ahora también tenemos un batería en los directos. En el disco no hay baterías, solo había cajón. Y ahora el directo será más interesante aún.


Cómo consiguen estas fechas por Europa?
A través de Djs de música mestiza. En Suiza funcionó así. El nos pinchaba y luego fuimos para tocar. Y a nosotros con no tener pérdidas, nos sirve. La gente llena aquellas salas siempre y resulta super beneficioso para los músicos. En cada sala tienes donde dormir.

Al estilo Beatles en Hamburgo...
Si, duermes arriba del escenario (risas) y super bien.


Este año seguro estaréis más organizados.
Sí, esta vez vamos con sentido común. Antes ibamos a ver qué pasaba.
Ahora iremos más a festivales. En Francia telonearemos a Ojos de Brujo.
Gambeat nos produce el directo y nos ha contactado muy bien. 


Tenéis todo el resto del año cubierto?
Si, ya está todo cubierto. Nos llaman y tenemos que decir que no. Tenemos ochenta fechas confirmadas. Ojala fuera así cada año. También nos ha contratado un francés que está en Londres. Tocaremos tres días seguidos en Londres, en tres clubes diferentes. 


Habéis llenado un Apolo diez días de tocar.
(risas) Sí, ningún grupo había conseguido eso sin discográfica. Y siendo un grupo semi desconocido para la mayoría. El otro día, un periodista de radio me decía: “esto no es raro, es único”. Fue espectácular. Hemos llenado el Apolo con público que sólo nos venía a ver a nosotros. Nunca habíamos estado tan nerviosos antes de tocar en un lugar. 

Háblame de “Meninos de rua”, de Brasil.
Es un proyecto que busca ayudar a niños de las favelas de San Pablo. Hicimos “Minha rua”, lo grabamos y les cederemos nuestras regalías de la canción. Viajamos y tuvimos una experiencia muy fuerte con ellos. Y ahora les enviaremos este dinero nosotros mismos, así te aseguras que llega.


Sin intermediarios, como siempre la pegatina...
(risas). Para qué te vas a fiar de otros...Si tú lo puedes hacer.